Parece mentira pero me he quedado hecho polvo cuando he visto esta noticia. Una campaña no completamente contra el botellón sino a favor del divertimento concienciado para respetar a los demás. Y además no es la primera vez que el alcalde de mi pueblo aparece con iniciativas tan curiosas como esta [Aqui iba a poner un enlace a un post de Alberto pero resulta que se ha roto, aunque básicamente mandaba aquí].
Sinceramente la medida me parece muy acertada. Combatir contra las reuniones de los jóvenes es una cruzada imposible, pero al menos podemos intentar que se conciencien en tirar las cosas en su sitio.
ResponderEliminarLo cierto es que siempre me ha dado mucho coraje el que los niñatos no encuentren problemas en trasladar las bolsas cargadas de cosas hasta el punto de reunión, pero que luego no sean capaces de avanzar 3 pasos para tirar los restos vacíos a la papelera más cercana.
En fin, sobre el enlace roto, es una pena, porque cuando hay foto, la noticia gana en interés :P